Prefiero ser consumido por trivialidades mentales fundamentales que diluciden la bipolaridad que el todo presenta, antes que permitir terminar de contaminar una mirada que se ha venido formando
de preguntas, que a su juicio y sin ánimo de imponer como verdad, aporta al cuerpo, mente y espíritu más que esos ojos que enceguecen y esa boca que calla. Me proclamo ser de instinto y
pensamiento, me despido del sentirte y me olvido del quererte.
EL VERDADERO DUELO ES MENTAL.
Escribir comentario